jueves, 22 de julio de 2010

En la Frontera del Levante


Me parece curioso como los extremos opuestos, en este caso, del territorio, pueden albergar lugares que en su contrastante realidad pueden maravillar a cualquier ser humano que sienta apego a la naturaleza. y lo contrastante va más allá de la diferencia en la cobertura boscosa, también abarca esa realidad que se vive en la ciudad y que, en las fronteras, pasa más que desapercibida.

En los últimos días, en compañía de Pepe y Roberto, realizamos dos viajes hacia el Lago de Güija y el resto de cuerpos lacustres de Jutiapa, descubriendo un mundo aparte, cálido, lleno de paisajes impresionantes y de gente que extiende la mano al paso del visitante. También nos acompañaron zancudos, vacas y problemas mecánicos, sin que ninguno de estos factores alterara la magia de visitar una serie de espejos plateados, de mínimas dimensiones, como tanta cosa que en guate asemeja una maqueta del mundo.

Y cada uno de estos laguitos tiene su encanto particular comenzando, de sur a norte, por Nisguaya (foto inmediata superior), una laguna de sabana rodeada por pastizales, en cuyo acceso fuimos abastecidos de agua para aplacar la sed por la señora de la casa patronal de la finca ganadera que permite el acceso a este lugar. Acá fuimos perseguidos por una vaca que cuidaba de sus terneros y atacados por una jauría de chuchos que parecían de buena raza y que, por ende, no eran de fiar, así que optamos por asustarnos, caernos y reírnos, apreciando aún más lo bella que es la vida en estas campiranas regiones.

En el mismo paralelo, nuestra misión tubo un desenlace a pedir de boca: un atardecer caminando por la meseta que separa La Encantada  y El Comendador (fotos 3 y 1 en orden de arriba para abajo). Estas dos lagunas deben ser el paraíso, precedidas por una comunidad de pescadores y labriegos del campo que viven al mismo ritmo del vaivén del agua, nos invitaron a no marchar jamás a disfrutar la puesta de sol y luego, olvidar que al oeste una ciudad caótica nos esperaba con ruido, humo y granadas en los buses nuevos...

1 comentario:

Analiss dijo...

Me parece toda una aventura, lo que les paso, muy bonitas fotos tambien