martes, 11 de octubre de 2011

En el cerro de las cañas podridas

Una visita más a la Cordillera Central de Guatemala. De nuevo realizamos con Yvonne y ahora (después de tanto y tanto) con Marlen  un recorrido, con fines educativos, a los sitios arqueológicos Chu'Taxtyoox (Sacapulas) y Q'umarkaaj (Santa Cruz del Quiché) en compañía del grupo de estudiantes de Arqueología de Tierras Altas y Textos Indígenas de la Escuela de Historia.

Esta vez, parte de los objetivos del segundo día de trabajo era conocer los trabajos de restauración del patio para juego de pelota de Q'umarkaaj y la remodelación de la sala de sitio, situación que dejó en claro que, en todo oficio, aplica aquel adagio popular de "zapatero a tus zapatos". Prácticamente, las estructuras que conforman el juego de pelota fueron reconstruidas, aplicando cantidades innecesarias de concreto rebajado con tierra y empleando métodos poco adecuados para un sitio arqueológico que se conserva, aún con la humedad y el flujo de visitantes, en buenas condiciones. Esta "obra de infraestructura recreada en la plaza mayor del asentamiento prehispánico pone en evidencia la engorrosa situación de compadrazgo y malos manejos administrativos por parte de las autoridades estatales del Patrimonio Cultural, quienes, en vez de contratar arqueólogos conocedores del área y que han trabajado recientemente en el departamento de Quiché, llevaron a un grupo de investigadores especializados en arqueología de Tierras Bajas (y no es adecuado confundir el cebo con la manteca) ha un área de la cual tenían escaso conocimiento. Los trabajos de reconstrucción de estas estructuras, de acá en adelante, servirán para seguir confundiendo a los ya mal informados visitantes de la otrora ciudad principal del K'iche' Winak.


De la sala de exposiciones (que museo no es) remodelada en su totalidad, sobresale el espacio dedicado a la maqueta de sitio con sus reconstrucciones hipotéticas digitales (impresas en vinil de baja resolución), único espacio que contempla aspectos relativos al sitio arqueológico y que trasciende ante el resto de la exposición que más es una oda al plagio de documentos (pues no hay una sola cita textual en toda la sala) y que, encima, presenta resultados que han sido aplicados a la arqueología Maya de las Tierras Bajas y no al contexto de Q'umarkaaj.


Rescatable en esta incursión a la antigua metrópoli k'iche', el bues estado de los senderos y la presencia notoria de los pobladores locales que participan de la celebración de costumbre y de la sana recreación de fin de semana, así también, la convivencia entre investigadores, estudiantes y amigos que, de alguna manera, seguimos formándonos para no repetir los desastres que, a la fecha, siguen repitiéndose.

No hay comentarios: